miércoles, 22 de enero de 2014

Quien nos protege de las vacunas?

Una nota aparecida hoy en diarios de Chile, comenta el conflicto existente entre quienes cuidan la salud de las personas y los que, a pesar de ser representantes de los intereses públicos, sólo cuidan sus negocios.
Claro es que hacer negocios también puede ser del interés de todos, pero solo podria serlo cuando la salud queda al margen de éstos e incluso por encima. No hace falta tener uno o varios certificados ni diplomas para llegar a esta conclusión.
Es entonces enorme la indignación que me produce enterarme que una ley aprobada por el Congreso, en la que se prohibe el uso de timerosal en vacunas dirigidas a niños, embarazadas y ancianos, este siendo acosada para su veto por el propio presidente Piñera. Una ley que no fue nada fácil de conseguir debido al ya sabido poder cuyo lema es que vacunarse es algo extremadamente necesario y SEGURO.
Y,  debido a que la voz del poder suele ser soberbia y todopoderosa, hasta se ha escuchado al ministro de salud, el señor Mañalich, decir al respecto que la ley referida es peligrosa para la salud pública. Un completo ignorante irresponsable por decir lo menos, un genocida más que aunque sea en su consciencia llevará junto sus amigos y socios el enorme peso por ser responsables por los daños y muertes que el timerosal acarrea a corto y largo plazo.
Y ni siquiera empezamos a hablar de una ley acorde, justa y perfecta; esta ni siquiera lo es... y ya va camino a desaparecer.
Hablan de campaña de terror antivacunas como una forma primitiva de justificarse, ni siquiera son capaces de pensar con sentido común. Acaso es tan necesario el timerosal en las vacunas ?... cuando de por si tienen otros componentes nada santos, no solo los anticuerpos de tales enfermedades. El timerosal es el peor de ellos por ser una forma de mercurio, un metal muy tóxico. Es tóxico aun en las medidas que se dicen aceptables, y este es un punto por el que deberia escribir otra nota... No hay por lógica una medida aceptable de ningún veneno para el organismo mientras nadie se haga responsable de sus efectos por el resto de la vida, porque no hay como hacer un estudio honesto, suficientemente grande y serio por tanto tiempo, controlando la multiplicidad de variables que aparecen en la vida moderna, entre ellos el enorme consumo de productos con ingredientes que tampoco son "alimento para el cuerpo".
Soy madre y lucho dia a dia con un sistema que más que protegernos nos invalida como tutores de nuestros hijos, que nos llama exagerados cuando queremos cuidarlos y cuidarnos, que nos tilda de peligrosos y contagiosos cuando queremos hacer valer nuestros derechos.
Si somos capaces de comprender su ignorancia al menos, aquellos que ganan su salario con los impuestos que pagamos, podrian bajarse de su alto trono y reconocer que si tantas voluntades con conocimiento de causa lograron hacer que la ley se apruebe en el Congreso... entonces será que su peso tiene algo de verdad.
Estoy en Chile pero no juzguen por delimitaciones geográficas, lamentablemente el tema es una epidemia mundial.
Un abrazo, amigos. Pido disculpas por haberlos hecho esperar tanto. Y gracias por su apoyo.

1 comentario:

  1. Tarde o temprano iba a pasar esto. El tema de las vacunas y sus detractores van creciendo a medida que la gente se va educando, y no al contrario como nos dicen que debemos pensar.
    Aunque la ley vaya para atrás lo veo como un avance, un paso más hacia la honestidad.

    ResponderEliminar

Este es tu lugar para dejar comentarios: