viernes, 25 de noviembre de 2011

De camino a la utopía




Tal vez este sea un tiempo para ser registrado especialmente en la historia, en todas partes del mundo las personas estan atreviéndose a expresar su disconformidad, animándose a construir sus sueños en vez de dejarlos reposar en un espacio virtual. Hay quienes lideran grupos con fines concretos, unos para remover los cimientos, otros están enfocados en aterrizar las expectativas con proyectos de ciudades sustentables cuyo funcionamiento se basa en principios mucho más justos para la sociedad y más respetuosos para el planeta. Lo importante detrás de tanto fervor por hacer del futuro algo real es que cada vez es más visible la autoconciencia, la automotivación al tomar el poder en nuestras manos y hacer algo con él. Comienza a desagradarnos la idea de que un desconocido nos gobierne.
Existe represión donde hay un orden preestablecido que pretende mantenerse a cualquier precio, sucede debido a la incapacidad de los gobernantes de sentirse parte de los movimientos sociales, de tener empatía y fluir con los momentos de la sociedad. A ellos les toca vivir el ridículo, ser los censuradores, están cayendo en el fantasma del pasado, estan desapareciendo y no quieren admitirlo.
Si queremos ser dueños de nuestro destino primero tenemos que ser dueños de nuestras vidas, hacer de nuestros sueños algo posible, vivible. Ello no implica necesariamente tener millones de dólares en el banco que no podremos gastar en toda una vida, ni cientos de propiedades que no vamos a usar, sino que implica tener aquello que no tiene precio, un hogar, salud, educación, trabajo digno y con vocación, tener la oportunidad de participar activamente en el mejoramiento de la sociedad, en el bienestar de otros seres humanos, vivir en paz y con confianza al ser respetados en nuestra originalidad.  
Tengamos en cuenta que la tecnología es un arma de doble filo, debe ser una herramienta para construir nuestros ideales no un medio para alienarnos. No se trata de prohibirla, no se trata tampoco de adorarla. La tecnología es tan sólo un conjunto de creaciones humanas que deben estar a nuestra completa disposición, la de todos los seres humanos, para alcanzar todo aquello que nos parece lejano. Entonces no es más que algo útil y funcional, no nos hace más especiales, no nos hace más atractivos, no nos hace tener amigos, no nos hace más exitosos. No nos dejemos engañar, la ciencia detrás de la tecnología nunca fue aplicada a motivos que no son económicos, siempre ha servido al dinero y al poder, pero podemos cambiar su destino, podemos hacer que las personas detrás de la ciencia y la tecnología comiencen a ver a través de nuestros ojos.
Estamos desafiando los límites de la sociedad, estamos desafiando la historia, estamos visualizando otro mundo.

2 comentarios:

  1. En términos generales todo está dominado por intereses egoístas. Cuando el mundo cambie esta concepción todo lo que conocemos serán herramientas utilizadas con fines igualitarios.

    ResponderEliminar
  2. Muy de acuerdo!! una visión optimista e impulsora!

    ResponderEliminar

Este es tu lugar para dejar comentarios: